Un triunfo con valor superlativo. Liniers superó con mucha autoridad a Centro Español jugando gran parte del encuentro con un jugador menos. Una prueba de carácter importantísima frente a uno de los rivales que más lo complicó en el torneo.
En la previa, analizando la formación del equipo y algunos cambios tácticos previstos por Damián Troncoso no podíamos ocultar cierta preocupación. Más aún cuando apenas iniciado el encuentro se fue expulsado Rosas Quintero por aparente agresión a un rival, y más aún cuando en su primer llegada Daniel Acosta desvió al córner un soberbio zapatazo de Nicolás López. El panorama pintaba sombrío pero Liniers pareció resurgir de sus cenizas: Apareció la inteligencia, el oficio, el temple y varias virtudes más relativas a las capacidades individuales y colectivas del equipo, a tal punto que el hombre de menos nunca se sintió, y es más, al cabo del primer tiempo quedaba la sensación que Liniers se podía llevar el partido. En los primeros 45 no hubo demasiadas alternativas peligrosas frente a los arcos. Un tiro de Sellecchia desde fuera del área que se perdió cerca del poste izquierdo, o una aparición sobre el final de Nicolás López sin mayores consecuencias. Pero Liniers daba la sensación que desde el orden y la solidez, si se lo proponía, podía lastimar, frente a un equipo gallego que parecía desorientado.
En el complemento nuevamente arrancó mejor el local. A los 4 otra vez la figura de Acosta para evitar la conquista frente a un peligroso remate de Nicolás López, y poco después Duré llegó por derecha pero su envío dio en la parte externa del arco. Liniers comenzó a mostrar su mejor cara. Potarski atrás sacaba todo, Monzón y Lynch por su sector marcaban diferencias, creció Galván y junto a él se soltó Szerdi, por su parte Sellecchia elevaba cada vez más su influencia y Basualdo hacía el trabajo sucio de desgaste defensivo rival. Circuito gravitante encendido. Liniers estaba para dar el golpe. Avisó Szerdi por el cuarto de hora con una media vuelta que se fue cerca de un poste. Seguidamente gran combinación previa y otra vez llegando Szerdi con buena respuesta de Balbuena enviando al córner, y de ése envío apareció Sellecchia por el segundo palo para convertir con remate fuerte que no tuvo una feliz respuesta del arquero. El gol conmovió a Centro Español que no salía de su confusión, apareció el nerviosismo y se quedó con un hombre menos por doble amarilla. Apenas pudo llegar a través de un remate de Ocampo sobre la media hora que levantó la pelota por arriba del horizontal. Liniers se fue adueñando del encuentro. Basualdo en una contra casi convierte el segundo y faltando 7 minutos en veloz entrada Willian Giménez enfrentó al arquero que lo derribó como último recurso viendo la roja. De esa infracción derivó el segundo gol con un espectacular remate de Sellecchia que hizo estéril el esfuerzo del arquero suplente.
Gran triunfo de Liniers obtenido desde el esfuerzo, el sacrificio, la garra y la potencialidad del equipo que apareció a pleno.
Faltan 90 minutos, pero la sensación es que La Topadora ya tiene un pie en la final y fundamentalmente que jugando así la ilusión del ascenso parece cada vez más cerca de concretarse.
Víctor Marinelli
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