El antecedente de las tres victorias consecutivas pusieron alta la vara para Liniers, que no pudo repetir frente a un Central Ballester que lo complicó en demasía. La levantada final del celeste le permitió terminar sexto a 5 puntos de la punta, y con expectativas a futuro.
El campo de Juventud Unida aguantó aceptablemente la lluvia caída, aunque se lo notó muy resbaloso y desparejo en algunos sectores. Liniers durante el período inicial impuso condiciones. A los 7 una media vuelta de Sellecchia se fue cerca de un poste. El Celeste apostó a la pelota detenida sin réditos. El partido por momentos fue muy chato y sin emociones. Cerca de la media hora tuvo Liniers su mejor momento. Primero tras gran combinación se lo perdió Lynch salvando Ghiglione al córner, seguidamente otra vez el arquero se lució ante un cabezazo de Potarski y poco después estuvo cerca Hugo Pérez entrando por derecha. El local sin vuelo en función atacante, con sólo un delantero, pobló el medio tratando de cortar circuitos. Sobre el final otra vez inquietó Sellecchia. Liniers sin el lucimiento de otras tardes marcaba diferencias.
Pero la historia fue cambiando en el complemento. El local se animó más y encontró caminos para llegar. A los 2 salvó Ammaturo sobre la línea un remate de Panozzo y en la réplica Basualdo exigió a Ghiglione sobre su derecha. Inmediatamente otra vez el arquero, figura en Ballester, salvó su arco ante un envío de Sellecchia. A medida que corrieron los minutos creció la figura punzante de Kevin González en el local, que marcó el rumbo de su equipo. A los 11 se proyectó el volante y su centro fue salvado providencialmente por Hugo Pérez ante una entrada de Ventecol. Liniers ya no tenía el control del primer tiempo a pesar del esfuerzo de Galván que se debatía en el medio. Lo tuvo Sellecchia de media vuelta y pasada la media hora la más clara fue de Duarte en un mano a mano con el arquero que brillantemente tapó abajo. Ballester sintió que podía y lo fue a buscar también. Pero se reavivó la luz roja. A los 35 Ammaturo evitó el tanto cara a cara con Lanzillotta luego de una serie de rebotes en otra chance clara del local. El final fue emocionante, donde los dos quisieron ganarlo. El empate dejó un sabor a poco en Liniers, pero merituó lo hecho por Ballester en el complemento.
Liniers no repitió anteriores actuaciones. No tuvo la precisión y la efectividad que lo caracterizó y atravesó momentos comprometidos como nunca hasta el momento había soportado.
Concluye así la primera rueda. En el balance, Liniers estuvo lejos de lo esperado. El equipo combinó grandes actuaciones con otras que dejaron mucho que desear. Hubo gran diferencia en el rendimiento de local (sumó 17 puntos) con el de visitante (apenas 5).
Otra característica fue que la mayoría de los puntos los perdió frente a equipos de mitad de tabla hacia abajo.
El cupo de 4 refuerzos permitirá, en caso de una buena elección, potenciar al equipo, que tuvo un repunte con la llegada de Damián Troncoso, pero que necesita más regularidad en el funcionamiento.
En un torneo de gran paridad, Liniers potencialmente tiene todo para marcar la diferencia. Esperemos pueda aprovecharlo.
Víctor Marinelli
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