Llega a su fin la rueda clasificatoria. Todos los partidos se juegan al mismo horario porque en todos hay en juego puntos importantes. Liniers visita a Juventud Unida con la necesidad de ganar para asegurarse ventaja deportiva en cuartos de final.El G8 ya tiene sus clasificados, pero es de suma importancia la posición final porque define localía y en cuartos hasta el pasaje a semifinales. Liniers tiene la amenaza de Atlas que juega con Muñiz por lo que no deberá ceder puntos porque puede verse superado por el Marrón. Ganar también puede significar trepar algún lugar más en la tabla. En cambio un traspié significa no solo que Juventud lo supere sino varios equipos que vienen detrás.
El campeón, Victoriano Arenas, ya relajado con el título espera a Argentino de Rosario, que no ha cumplido una actuación destacada peleando el primer lugar, pero que se juega por alcanzar la localía en Rosario en el inicio del octogonal.
General Lamadrid no parece tener inconvenientes en cancha de All Boys (y a puertas cerradas) visitando a Yupanqui, el de menor puntaje en la tabla.
Un partido muy parejo que puede definir mucho es el de Argentino de Merlo, que viene levantando, y Centro Español, de enorme campaña, la mejor desde hace muchísimos años.
Atlas visita a Muñiz con toda la expectativa de volver a ganar y subir algún puesto en la tabla.
Por su parte Central Ballester visita a Paraguayo, que todavía no ganó en el año. El Canalla parece haber recuperado su poderío y buscará también subir algún escalón.
Como rara paradoja del fixture los dos partidos restantes involucran a los equipos que buscan eludir la desafiliación. Real Pilar necesita sumar al menos un empate en su visita a Lugano para quedar a salvo. Claypole el otro amenazado debe ganarle como visitante a Puerto Nuevo y esperar una caída de los pilarenses para ir a un desempate.
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