En un partido entretenido Liniers consiguió un nuevo triunfo, esta vez frente al campeón Victoriano Arenas (que presentó algunos suplentes). La superioridad celeste fue manifiesta y encontró en el arquero rival uno de los impedimentos para alcanzar mayor diferencia.
De salida La Topadora dejó en claro sus intensiones. A los 7 y 15 Galván y Rosas se perdieron de cabeza el primero, e inmediatamente Szerdi cerca… Sin embargo Mohammed desbordó por derecha y su preciso centro fue conectado por Dávalos para superar la estirada de Cheppi. Lejos de amilanarse, Liniers siguió en su búsqueda y Victoriano presentaba fragilidad atrás. A los 28 Szerdi tocó por arriba del arquero y cuando Basualdo se aprestaba a convertir fue derribado por Venturini dentro del área. Kopanchuk sancionó el penal y Basualdo llegó a su cuarta conversión. El gol descontroló al visitante que abusó del juego fuerte y al borde del reglamento al amparo de un arbitraje muy permisivo. Liniers se hizo fuerte en el medio. Crecieron los trabajos de Galván y Riquelme, al tiempo que tanto Szerdi como Basualdo se hacían imparables. Pertossi tuvo su chance sobre los 40, pero no definió bien sobre la salida del arquero y tras cartón apareció nuevamente Basualdo que en gran maniobra personal definió con jerarquía por arriba del arquero y cuando se aclamaba el tanto apareció Venturini para salvar sobre la línea. El gol se veía venir. En efecto, instantes después en lujosa acción combinaron Riquelme, Vidal y Pertossi que entrando por adentro definió con categoría. Y el delantero tuvo nueva chance antes de terminar la etapa pero el arquero Véliz tapó.
En el segundo tiempo se intensificó la superioridad celeste, con espacios para atacar y sensación de peligro inminente, a pesar que Victoriano recurrió al ingreso de dos de sus grandes figuras Coselli y Negro Villarreal. A los 7 desborde de Matías De León, de gran segundo tiempo, y furibundo cabezazo de Szerdi apenas alto. Riquelme fue otro de los destacados en el medio con quite y apoyo. A los 15 Basualdo frente a Véliz y tapó el arquero. Victoriano muy jugado, por momentos dejó sólo dos defensores y muchos espacios que aprovechó Liniers para generar situaciones de todo tipo. El ingreso de Hugo Pérez, como es habitual, dejó las jugadas con su sello. A los 28 tres rivales por el camino y cuando se aprestaba a eludir al arquero, éste salvó con un manotazo. Pertossi siguiٕó buscando y de cabeza se perdió el tercero. El desperdiciar tantas opciones dejaba cierta incertidumbre para el final porque Victoriano nunca se entregó. A los 36 en su única llegada Coselli exigió a Cheppi. El ingreso de Hvala fue otra de las cartas ofensivas y por dos veces el delantero se perdió el tanto: primero por gran intervención de Véliz y luego remató por arriba cuando Pérez esperaba el pase solo frente al arco.
Un triunfo ampliamente justificado, muy exiguo en cifras por lo expuesto en el campo de juego. Tal vez la gran preocupación fue la ineficacia ante tanta cantidad de opciones malogradas (superó la docena). Pero lo importante es que el equipo a partir del partido frente a Lugano recompuso la imagen luego de una mini racha desfavorable.
Liniers encara el final del torneo con chances de llegar a posiciones que otorgan ventaja deportiva en cuartos de final. Un equipo con rendimientos parejos, convencido en su potencial y que encara con agresividad los partidos, dejando en claro sus firmes aspiraciones por el segundo ascenso.
Víctor Marinelli
No hay comentarios:
Publicar un comentario