Concentrado en el Colegio Don Bosco de Ramos Mejía, Liniers espera la revancha frente a Lamadrid.En el primer partido La Topadora fue el único que quiso ganar el partido pero chocó con la firmeza defensiva del Carcelero, que con un hombre menos tuvo el mérito de resistir y llevarse un empate.
Ahora la historia puede ser distinta. La obligación y la presión es del local. Liniers, que no pudo desarrollar su juego, seguramente ahora tendrá con más espacio, la posibilidad de aprovechar sus oportunidades.
La paridad es marcada. Con recursos distintos, pero paridad al fin. Lamadrid jugando al error ajeno y a las pelotas detenidas. Liniers con la solidez de su bloque defensivo tiene más volumen de juego, pero no siempre llega a concretar todo lo que genera.
Es casi una final anticipada. Para muchos el que sale airoso de esta llave será el equipo que ascienda.
Dos detalles más. Liniers este año marcha invicto como visitante, y juega en una cancha que en los últimos años siempre le ha sido esquiva.
Para mañana Liniers no anuncia cambios en el equipo inicial que jugara el partido de ida. David Vidal está en el límite de amarillas.
El banco casi confirmado iría con: Juan Ledesma, Thiago Monzón, Nahuel Riquelme, Walter Ricabana, Willian Giménez, Hugo Pérez y Diego Pertossi.
Un partido que se anticipa cerrado, apasionante, donde ambos tratarán de no cometer errores. Si hay empate habrá remates desde el punto penal.
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