Para Liniers la historia cambió radicalmente. De mirar de reojo la punta y el ascenso directo, ahora deberá remar de atrás por llegar al Reducido. Un fallo totalmente incoherente lo dejó por ahora con 17 puntos menos. Pero la historia tal vez no termine allí... por más alegría que hoy tengan muchos equipos que sumaron puntos desde un escritorio.
El rival de turno será Juventud Unida, que lo sorprendió en el último partido de la rueda inicial (fecha pendiente). Paradojalmente fue el último partido que ganó, ya que viene de 4 derrotas en serie.
Para Liniers ahora los puntos cobran una importancia sustancial en la idea de descontar los 10 puntos que lo separan del noveno lugar. El Reducido será un nuevo torneo, donde todos arrancan de cero, al margen de alguna ventaja de localía en la revancha. Por ello, llegar cambiaría radicalmente el panorama, toda vez que seguramente lo haría con un total real de puntos que indicaría la supremacía mostrada en el campo de juego y con un enorme envión. Por lo tanto doblemente potenciado sería el ingreso.
La tabla sufrió por ahora variantes en algunas posiciones en función del reparto de puntos de los equipos que protestaron. Leandro N. Alem e Ituzaingó quedaron juntos en punta. Ambos jugarán en cancha de Liniers, visitando a Yupanqui y Paraguayo respectivamente. Las posibilidades de seguir en punta está abiertas para ambos.
Atlas recibe a Lamadrid en partido que puede complicarse para el Marrón toda vez que el Carcelero parece ir recuperando terreno de a poco, ahora más firme en puestos de clasificación.
Victoriano Arenas y Argentino de Rosario quedaron también en posiciones expectantes. Ambos serán locales y favoritos ante Puerto Nuevo y Lugano respectivamente.
Completan Central Ballester-Centro Español, uno afirmándose en el octogonal y el otro cada vez más complicado y en partido trascendente para la desafiliación Muñiz-Claypole.
Liniers deberá ahora fijar la mirada en los lugares de clasificación. No solo sumar un muy buen porcentaje de puntos, sino esperar que algunos resultados acompañen.
El rival de turno será Juventud Unida, que lo sorprendió en el último partido de la rueda inicial (fecha pendiente). Paradojalmente fue el último partido que ganó, ya que viene de 4 derrotas en serie.
Para Liniers ahora los puntos cobran una importancia sustancial en la idea de descontar los 10 puntos que lo separan del noveno lugar. El Reducido será un nuevo torneo, donde todos arrancan de cero, al margen de alguna ventaja de localía en la revancha. Por ello, llegar cambiaría radicalmente el panorama, toda vez que seguramente lo haría con un total real de puntos que indicaría la supremacía mostrada en el campo de juego y con un enorme envión. Por lo tanto doblemente potenciado sería el ingreso.
La tabla sufrió por ahora variantes en algunas posiciones en función del reparto de puntos de los equipos que protestaron. Leandro N. Alem e Ituzaingó quedaron juntos en punta. Ambos jugarán en cancha de Liniers, visitando a Yupanqui y Paraguayo respectivamente. Las posibilidades de seguir en punta está abiertas para ambos.
Atlas recibe a Lamadrid en partido que puede complicarse para el Marrón toda vez que el Carcelero parece ir recuperando terreno de a poco, ahora más firme en puestos de clasificación.
Victoriano Arenas y Argentino de Rosario quedaron también en posiciones expectantes. Ambos serán locales y favoritos ante Puerto Nuevo y Lugano respectivamente.
Completan Central Ballester-Centro Español, uno afirmándose en el octogonal y el otro cada vez más complicado y en partido trascendente para la desafiliación Muñiz-Claypole.
Liniers deberá ahora fijar la mirada en los lugares de clasificación. No solo sumar un muy buen porcentaje de puntos, sino esperar que algunos resultados acompañen.
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