Para Liniers no había muchas alternativas. Sólo el triunfo servía para seguir con esperanzas de llegar a la punta. Cambio de esquema y de nombres con resultado positivo. El partido luego de mucha incertidumbre por su disputa, arrancó demorado en 40 minutos (terminó 19.32) a raíz de la tardanza en llegar por parte de la delegación rosarina que sufrió la rotura de su micro. Liniers arrancó bien pero sufrió por momentos, pero cuando parecían venirse las primeras sombras de la noche apareció la luz…
El comienzo no ofreció demasiados matices. Liniers con mayor dominio, buscando asociarse a través de Coronel, Ocampo y Ricabana. Argentino, que arrancó sin precalentamiento, le costó acomodarse. Cuando poco había acontecido llegó un envío largo, rechazó corto el arquero Lucas Rodríguez en salto con Coronel, y ese rebote fue aprovechado por Allende con estupendo remate al ángulo desde afuera del área. Momento propicio para marcar más distancia que Liniers no aprovechó frente a un confundido rival. Ricabana desequilibró por derecha pero su envío cruzado no pudo ser conectado ni por Castano ni por Ocampo con el arco semidesguarnecido. La tibieza que demostraron los rosarinos hasta ese momento cambió radicalmente sobre el final de la etapa cuando un cabezazo de Silva requirió un esfuerzo supremo de Cabrera que desvió sobre su izquierda y el balón fue devuelto por el poste. Y nuevamente la visita con un envío largo hizo estremecer a un arquero adelantado. Respondió Liniers con una buena maniobra de Riquelme que habilitó a Coronel cuyo remate se fue apenas desviado.
Los mejores momentos de Argentino fueron en el comienzo del complemento, con el ingreso de Camafreita como tercer delantero y un dominio insistente que hizo por momentos tambalear el arco de Cabrera, con una serie de rebotes interminables y la sensación de peligro inminente. En el peor momento, apareció la personalidad de Allende y Romero, el gran trabajo de Riquelme, y con los ingresos de Cáceres y Giménez, Liniers tuvo más aire, mayor tenencia y aprovechó también el cansancio visitante. Sobre la media hora Argentino reavivó la luz roja a través del peligroso Tedesco, pero Cabrera respondió con acierto. Liniers manejó los tiempos, puso temperamento y de contra a través de Giménez se acercó al segundo tanto. Jorge Mitre en su único error ignoró un claro penal al joven delantero celeste sobre los 38. En el descuento, apareció el talento de Braian Cáceres para sacarse de encima dos rivales y ceder a Coronel que de zurda la clavó abajo junto a un poste, y llevando el alivio a Villegas.
El resultado ofrece cierta holgura, pero el celeste tuvo momentos muy comprometidos. Argentino fue un rival exigente. Con el nuevo planteo de doble cinco, Liniers ganó peso en el medio, con un Riquelme que marcó el rumbo y se complementó acertadamente con Romero. Buenas apariciones de Ricabana por derecha y de Braian Cáceres y Willian Giménez con sus ingresos. Coronel abonado al gol últimamente. Firme esta vez Cabrera en el arco, la defensa no ofreció flaquezas con Allende subrayando otro de los puntos altos.
Liniers se mete otra vez en carrera por alcanzar uno de los dos lugares para la Copa Argentina. De local el Juan Antonio Arias vuelve a ser un fortín con 12 fechas sin caídas. Hay mejorar de visitante, de los últimos 14 partidos La Topadora tan sólo pudo ganarle a Claypole.
Víctor Marinelli
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