Liniers se fue a lo grande y no es una contradicción. Ovación final para un equipo que dejó todo para seguir con vida y que mereció largamente el triunfo ante un Italiano que terminó de rodillas. Ultimos minutos emocionantes y a pesar que el pitazo final determinó la condena, vale el aplauso para un plantel de leones que estuvieron cerca de torcer una historia que arrancó muy mal.
Lamentablemente la inestabilidad defensiva volvió a ser el talón de Aquiles. Cada centro que cayó sobre el área de Cabrera fue motivo de preocupación. A los 23 lo tuvo Meza de cabeza aprovechando un error del fondo y a los 38 el delantero no perdonó un nuevo fallo defensivo y puso en ventaja a Italiano. Liniers tuvo su más clara opción apenas iniciado el partido en un tiro libre de Fleitas que sacó Ruhl por arriba. El celeste intentó llegar con prolijidad a través del circuito entre Coronel, Cáceres y Castano. La salida de Fleitas promediando el período (llegó con lo justo por una molestia muscular) fue otro escollo a superar en un equipo que no se enloqueció y para esperar su momento.
En el complemento había que dejar el resto aún a despecho de pagarlo caro. Liniers se hizo dueño del juego e Italiano trató de golpear de contra. A los 11 Miranda Moreira tuvo una oportunidad propicia que desaprovechó, hecho que no aconteció con Marecos que en un nuevo error defensivo pudo convertir el segundo tanto para la visita. Un gol que debió ser invalidado por Yael Falcón Pérez ya que el jugador se llevó la pelota con su mano izquierda. El panorama pintaba muy negro. Pero Liniers no se desesperó, insistió y en los últimos 20 minutos apabulló a Italiano generando innumerable cantidad de situaciones de gol, y convirtiendo a Ruhl en máxima figura con atajadas decisivas. Así apareció un tiro libre de Coronel que el arquero salvó sobre su palo izquierdo. Luego una espectacular chilena de Castano fue contenida por Ruhl, pero la pelota llegó a traspasar la línea y en un nuevo error del árbitro Falcón en combinación esta vez con el asistente Mauro Ingargiola no sancionaron el tanto. Por fin cerca de la media hora Coronel de cabeza puso el descuento y el viaje a la ilusión. Con enorme coraje Liniers arremetió furiosamente en los últimos 10 minutos. Braian Cáceres remató por arriba desde posición inmejorable, luego Paiva de cabeza hizo nuevamente extremar al arquero, Mendoza exigía con sus tiros libres, el Polaco Ortíz López tuvo su oportunidad a escasa distancia del arco y Coronel cabeceó apenas alto solo frente al arco. Hubo 4 minutos de descuento y en medio de un final de altísimo voltaje igualó Castano. Italiano estaba nocaut. Pero el tiempo que quedaba era escasísimo, apenas dio para que Cachi López intentara un remate de media distancia que no tuvo consecuencias. Pitazo final, Liniers se fue con la frente en alto y sin reproches. Italiano también lo lamentó, pero hizo muy poco para ganarlo.
Cuando resta jugar un partido, concluye una estadía efímera de Liniers en la categoría. A la hora del balance está claro que La Topadora arrancó tarde. Faltó, al armar el equipo, algún refuerzo más para hacer la diferencia. De los primeros 8 partidos apenas pudo sumar 1 punto. El repunte final no le dio para salvarse, al tiempo que contradictoriamente los de menor promedio pelearon el ascenso. Fue una dura experiencia para tener en cuenta.
Como dice el tango “ya vendrán tiempos mejores”. El milagro no se dio, pero es una marca de la historia: Liniers va a volver y seguramente con más fuerza.
Víctor Marinelli
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