Liniers se jugaba mucho frente a Laferrere, tanto que un nuevo traspié lo dejaba out de la posibilidad de pelear el campeonato y seguramente traería consecuencias en cuanto a la conducción técnica.
El comienzo fue muy desalentador. El verde en dos llegadas a través de Jeandet aprovechó las dudas defensivas del celeste para poner a los 20 minutos el marcador 2 a 0. El primer gol dejó muchas dudas en cuanto a la posición del goleador.
Pero La Topadora no desesperó, a pesar que cada incursión de Laferrere, especialmente por izquierda, abría interrogantes. Con el correr de los minutos fue creciendo Silvio Fuentes en el medio y Brunetti se tornó cada vez más intratable. Sobre el final de la etapa, luego de varios acercamientos, Daniel Casais de tiro libre descontó.
En el complemento, como en tantas otras oportunidades, Liniers remontó la adversidad. A poco de comenzado Ernesto Banegas puso la igualdad. Laferrere sin resto físico, comenzó a sentir el trajín. Las jugadas de peligro comenzaron a sucederse sobre la valla de Arzamendia, que no siempre respondió acertadamente. Dos córners de Silvio Fuentes definieron la contienda. Primero a través de un cabezazo de Palmerola entrando por el segundo palo y luego, con gol olímpico llegó el cuarto. Liniers recobraba la contundencia perdida en los últimos partidos. Sin mayores sobresaltos llevó el trámite hasta el final. En el quinto minuto de descuento descontó Cafferata de cabeza, pero sólo para decorar el resultado.
Gran segundo tiempo de Liniers, el equipo volvió al nivel que nos tenía acostumbrados hace algunas fechas atrás, superando con autoridad a Laferrere, que se fue desdibujando con el correr de los minutos.
Faltan 8 fechas, 24 puntos, la esperanza sigue viva. Se recobró la confianza perdida, aparecieron las individualidades del medio hacia adelante y con nuevos bríos buscará volver a la punta. Felizmente, todavía está a tiempo.
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