NO PARA DE GANAR

Ambos equipos jugaron con mayoría de suplentes. Sorprendió Yupanqui en el comienzo, generando situaciones y estableciendo supremasía en el medio. A los 7 Bruno puso en ventaja al local: tras un mal rechazo de Tichelio, no tuvo inconvenientes en convertir con el arco semivacío. Sin embargo, luego de la primer mitad, Liniers con algunos cambios posicionales y en función del trabajo de Vigna y Gnocchi, se fue adueñando de las acciones y generando chances claras para convertir. Sobre los 32, una infracción dentro del área sobre Portillo permitió a Gnocchi de penal igualar el partido. Tras cartón, una gran jugada de Portillo fue culminada por el ex Berazategui muy cerca del horizontal.

En el segundo tiempo se vio lo mejor de La Topadora, al tiempo que Yupanqui comenzó a sentir el trajín. Crecieron Fuentes y Virano, infranqueables en el medio, mientras que fue más influyente Portillo. En la generación de juego, Vigna y Gnocchi siguieron marcando la diferencia. Las jugadas de gol se sucedieron, y por eso no extrañó que sobre los 21 Portillo se le escapara a La Loggia y con impecable definición ante la salida del arquero convirtiera el segundo tanto. El nerviosismo se apoderó del Trapero, que sufrió dos expulsiones, en ambos casos por fuertes intervenciones contra Nilo Vigna. Faltando 5 minutos, también debió ver la roja el arquero local, siendo último hombre, derribó a Portillo en posición de gol. A pesar de la desventaja numérica, Yupanqui se jugó entero en los minutos finales, y por dos veces Tichelio evitó el empate.

Un partido que fue atractivo, luchado y a pesar de ser superior, Liniers recién pudo festejar al final un triunfo que le permitió mantener la cuarta ubicación en el torneo.

Faltaron siete titulares, pero aún con otras caras el equipo estuvo a la altura de las circunstancias y mantuvo la idea clara de juego que le viene dando tantos éxitos, toda vez que llegó al séptimo triunfo al hilo y trece fechas sin perder. Le costó adaptarse al campo y a un rival enjundioso que rápidamente se puso en ventaja y peleó el partido en todo momento, aún en inferioridad numérica; pero cuando le encontró la vuelta, una vez más no dejó dudas.

Víctor Marinelli