Lo que hasta ayer parecía una verdad absoluta, luego de la jornada del miércoles, comienza a ser una verdad a medias. Una vez más el fútbol corre peligro de no jugarse. Es que se espera la contraofensiva de la empresa TSC en virtud del rompimiento contractual por parte de la AFA.
Presentaciones judiciales y trámites sumarísimos podrían derivar en medidas cautelares por parte de algún Juez que impliquen el no comienzo del fútbol oficial.
Al decir de uno de los vicepresidentes del club y delegado en AFA, Daniel Garabaglia (en nuestra audición por AM 770) "el martes sabremos definitivamente si los torneos comienzan el 21". Acababa de salir de la reunión de la divisional D y la incertidumbre era manifiesta.
Una vez más habrá que esperar. Mientras tanto los días pasan y el desgaste de los planteles también.
Esperemos que por fin en el corto plazo se produzca la normalización de una temporada que, en pleno agosto, todavía no comenzó.
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