A partir del día 12, la Topadora comenzará una etapa clave para afrontar los 15 encuentros que le restan de cara a la finalización del campeonato. Más los cotejos del reducido, excepto que el equipo de Ruggero consiga una hazaña realmente inesperada.La preparación será en doble turno, comenzando a las 8:30 y realizando un parate a las 10 para proveerse de una media merienda. Retomando la actividad de 11 a 13, para luego permanecer en el club, donde el plantel en su totalidad almorzará en el buffet.
La pretemporada se efectuará, casi en su integridad, en las instalaciones del club Social y Deportivo Liniers. Pero además, bajo las órdenes del PF Daniel Vicentín, el plantel entrenará durante tres días en Ezeiza.
Claro que no solo será el turno de Vicentín para imprimir su impronta en la preparación física del conjunto de Villegas. Sino también Osvaldo Ruggero y Germán Sassone tendrán tiempo hasta el 14 de febrero, fecha de la reanudación del torneo, para ajustar tácticamente las piezas y el andamiaje en el campo de juego de los players que defenderán la camiseta del Celeste.
Comienza un nuevo ciclo, con varias bajas y algunas altas, respaldadas en la idea futbolística de Ruggero. El objetivo es siempre el mismo, pero este año la presión para Liniers será menor que en otras oportunidades, habrá que ver si esto finalmente le juega a favor o en contra, todo dependerá del rendimiento de los jugadores más experimentados, que lograron continuidad en un plantel con demasiadas modificaciones.
David Tarantino
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